Si bien es cierto que los periodistas que sufren más agresiones de acuerdo con las estadísticas son lo que trabajan en los medios impresos, también lo es que todos los demás se enfrentan a las mismas situaciones; por lo que no considero prudente que sólo se hable de la prensa.
Los periodistas no trasmiten la verdad ni ilustran, informan sobre hechos y acontecimientos, también expresan sus ideas y opiniones, pero evidentemente sólo transmiten una parte de la información, por lo que al momento de investigar específicamente sobre hechos, deben cumplir con varios requisitos, uno de ellos es contrastar sus fuentes; con la intención de lograr que su información sea veraz.
El que México esté dentro de los cinco países con mayores índices de delincuencia organizada no es necesariamente el único factor que propicia que se den las agresiones en contra de los periodistas, recordemos que también están los servidores públicos, las personas que se dedican al narcotráfico y aunque no lo pareciera, la sociedad en general. No en vano México ha ganado el segundo lugar a nivel mundial, como uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo.
“Los buenos periodistas prestan a la sociedad un servicio mejor que los funcionarios públicos”, definitivamente no, porque se parte de la afirmación de que todos los funcionarios públicos son “malos” e ineficientes; es cierto que la función primordial del periodista es la denuncia, pero no me parece comparable, no porque uno sea más importante que el otro, los dos son fundamentales para la sociedad y su funcionamiento ya que en esencia los dos tienen como finalidad el bien social, la “lealtad” de ambos está con la sociedad.
En cuanto a la colegiación de los periodistas, hay que recordar lo que la Corte Interamericana de Derechos Humanos expresa en una de sus opiniones consultivas:
La Corte concluye, en consecuencia, que las razones de orden público que son válidas para justificar la colegiación obligatoria de otras profesiones no pueden invocarse en el caso del periodismo, pues conducen a limitar de modo permanente, en perjuicio de los no colegiados, el derecho de hacer uso pleno de las facultades que reconoce a todo ser humano el artículo 13 de la Convención, lo cual infringe principios primarios del orden público democrático sobre el que ella misma se fundamenta.
Así que en el caso particular de los periodistas, la colegiación obligatoria está prohibida y claramente no es la solución de las agresiones cometidas en su contra. La definición de periodista ya existe, quizá sea limitada, pero existe; así que la propuesta debería, en todo caso, basarse en su modificación.
De acuerdo con la Ley del secreto profesional del periodista en el Distrito Federal, se entenderá por periodista “Toda persona que hace del ejercicio de las libertades de expresión y/o información su actividad principal, de manera permanente con o sin remuneración”, además de incluir las siguientes definiciones:
II. Colaborador periodístico: Toda persona que hace del ejercicio de las libertades de expresión y/o información su actividad principal o complementaria, ya sea de manera esporádica o regular.
III. Libertad de expresión: Es la prerrogativa que tiene toda persona para difundir y publicar ideas u opiniones a través de cualquier medio.
IV. Libertad de información: Es la prerrogativa que tiene toda persona para buscar, investigar, sistematizar, difundir o publicar hechos que sean considerados de interés público.
De acuerdo con la ley, todos los que en el Distrito Federal hacen del ejercicio de las libertades de expresión y/o información su actividad principal, de manera permanente con o sin remuneración, son periodistas. Por lo que en respuesta a tu pregunta “cabe preguntarse si periodista es quien lee noticias en un programa sin haber cursado la carrera, o quien disfrazado, realiza programas cómicos revestidos con notas periodísticas” la respuesta es si, sí son periodistas.
La constitución no define, no establece, de acuerdo con Laura Sámano es un marco legal generalizado, así que definitivamente no se puede incluir la definición de periodista en el texto constitucional, ya que para eso están las demás leyes; lo que sí se puede y se debe hacer es lograr la federalización de los delitos cometidos en contra de los periodistas, para eso se debe, como primer paso de acuerdo con algunos autores y promovedores de la federalización modificar el artículo 73 constitucional.
No me parece necesario crear un nuevo órgano encargado de investigar los delitos cometidos en contra de los periodistas, lo que se debe hacer es dotar de mayores herramientas, recursos, capacitación y sobre todo facultades, a los que conforman la fiscalía especial a la que se hace referencia. Por cierto en este blog se hace un breve estudio del acuerdo por el que se creó la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra Periodistas (Notas sobre el acuerdo A/031/06).
Se insiste en que la colegiación, además de estar prohibida e ir en contra del derecho internacional, no es la solución en contra de las agresiones.
Desde mi punto de vista el periodista debe transmitir la verdad, que recogió a través de la observación, la entrevista y la documentación. Y es lo que va a presentar a la opinión pública. Ya que no existe un instrumento de medición que arroje resultados.
ResponderEliminarPor otro lado afirmar que sólo transmiten una parte de la información es "arriesgado", más bien creo que algunas veces dependiendo el tema que están manejando, extreman cautela.
Además en toda publicación periodística se tiene que realizar un análisis de las características de la fuente y la búsqueda de fuentes concordantes, para que el resultado que se presenta a la opinión pública transmita certeza, realidad y veracidad.
Por otro lado cuando se habla de delincuencia organizada, ahí está inmerso el narcotráfico.
Además yo señalo en mi texto "Los buenos periodistas prestan a la sociedad un servicio mejor que los funcionarios públicos, ya que no le deben lealtad al Estado, sino..." Nunca señalo que TODOS, ni que son INEFICIENTES.
Y por ultimo además de agradecer tu amable comentario. Insisto "LA COLEGIACIÓN GARANTIZA EL BIEN COMÚN" y te recomiendo la nota que subí hoy de "definición de periodista"